El proyecto consistía en el cosido de ocho cuadernillos de 35 x 35 cm, cada uno de un color. Las tapas también las proporcionó el cliente, impresas.
Para que se pudieran ver los colores en el lomo, se optó por un cosido copto al que se le intercalaron hilos de los colores de los cuadernillos.
Fue un trabajo muy agradable de realizar, original y el interior muy trabajado y ¡al que espero que le hayan puesto muy buena nota!