En esta ocasión, la clienta tenía recopiladas unas revistas provenientes de sus antepasados (5 ejemplares).
El papel estaba muy viejito y se procedió a quitarle las grapas que tenían en los lomos para reforzarlos con papel japón. A continuación se cosieron, se encuadernaron con guaflex y se le pusieron unas guardas de papel de aguas hecho a mano.
También se le añadió un punto de libro de color rojo (a juego con las guardas).